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EFE
Toronto
La cumbre del G8 en Muskoka (Canadá) comenzó ayer con la bienvenida que el primer ministro canadiense, Stephen Harper, dio a los mandatarios de los ocho países del grupo, que durante dos días hablarán de desarrollo, paz y seguridad.
La cumbre se celebra en un complejo vacacional en la región de Muskoka, un idílico paraje salpicado por lagos y pequeñas cabañas, y situado a unos 200 kms al norte de Toronto, a donde los mandatarios se trasladarán hoy para la cumbre del G20.
Además de los ocho países más ricos (EEUU, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido, Canadá y Rusia), Harper invitó a mandatarios de un grupo de países con voz propia en materia de seguridad.
Toronto
La cumbre del G8 en Muskoka (Canadá) comenzó ayer con la bienvenida que el primer ministro canadiense, Stephen Harper, dio a los mandatarios de los ocho países del grupo, que durante dos días hablarán de desarrollo, paz y seguridad.La cumbre se celebra en un complejo vacacional en la región de Muskoka, un idílico paraje salpicado por lagos y pequeñas cabañas, y situado a unos 200 kms al norte de Toronto, a donde los mandatarios se trasladarán hoy para la cumbre del G20.
Además de los ocho países más ricos (EEUU, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido, Canadá y Rusia), Harper invitó a mandatarios de un grupo de países con voz propia en materia de seguridad.
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